El lean management es una estrategia de organización empresarial que se basa en el aumento de la productividad y la reducción de costes de forma simultánea. Este modelo busca la optimización de los procesos y la implicación de los trabajadores para mejorar la satisfacción de los clientes, ya que aporta mucho valor añadido al producto o servicio ofrecido. Tener una visión consumer-centric permite entender qué quiere el cliente y cómo solventar esta necesidad, por lo que una buena implementación del lean management implica que los procedimientos sean más rápidos, efectivos y rentables.
El lean management en el sector legal
El legal project management es la aplicación de esta estrategia en los despachos profesionales. Es un modelo de gestión de los asuntos legales basado en la organización por proyectos, es decir, la planificación eficiente de tareas y recursos necesarios para ofrecer la mejor solución posible..
Los clientes recurren a los despachos profesionales para obtener seguridad jurídica. Se trata de un entorno cambiante y dinámico que genera incertidumbre, por lo que acuden en búsqueda de expertos que puedan garantizar el éxito de su empresa.
La visión consumer-centric del legal project management permite encontrar cierta predictibilidad, certeza y seguridad, de manera que se ofrece una solución personalizada a los clientes. Para ello, se deben incorporar ciertas premisas al sistema de trabajo:
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Apostar por el análisis predictivo para determinar y potenciar las actividades que aportarán valor al cliente.
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Generar un entorno comunicativo fluido con los clientes, que elimine la percepción de que hablar con un abogado es complejo y requiere demasiados tecnicismos.
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La propuesta de servicios debe incorporar la combinación de elementos de un doble triángulo: alcance-tiempo-coste y calidad-recursos-riesgo.
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Gestionar los riesgos gracias a la previsión de los posibles escenarios que puedan producirse, las alternativas para cada uno de ellos, los recursos técnicos y profesionales necesarios, etc.
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Establecer un flujo de valor orientado al cliente, donde cobra más importancia el valor que aporta el despacho profesional que la eficiencia de los recursos asignados.
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La prestación de servicios profesionales no estandarizables requiere una interacción personal, por lo que las soft skills del profesional serán decisivas para la experiencia del cliente.
Implementa el lean management en tu despacho profesional
Para aplicar este método organizativo en tu despacho profesional, se deben seguir cinco pasos:
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Identifica el valor que quieres entregar: se debe ofrecer la mejor solución posible al cliente, por lo que los procesos que no den valor al servicio final se deben desechar.
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Analiza los procesos de producción: estudia cómo se desarrollan las fases de elaboración del servicio y cómo se entrega al cliente final.
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Distribución del trabajo: una vez se detecta qué funciona y qué no, es fundamental evitar las interrupciones. Se puede conseguir dividiendo el trabajo para localizar los fallos y subsanarlos rápidamente.
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Crea un sistema de trabajo: establece un proceso estandarizado para que todos los trabajadores realicen las tareas de una forma continua y con garantías de éxito. De esta manera, la empresa optimizará los recursos existentes, los procesos serán más rápidos además de requerir menos esfuerzo e inversión.
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Resolución de problemas y mejora del proceso: la prestación de servicios en el sector legal es muy dinámica, por lo que es vital adaptar la estrategia a las necesidades de cada entidad.
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