El social shopping consiste en la venta de productos a través de las redes sociales. Se está convirtiendo en una alternativa al ecommerce tradicional, aunque es importante entender cómo funciona la venta en redes sociales para sacarle el máximo partido.
Algunas de las funcionalidades que más se utilizan en este tipo de canales de ventas son:
Botones de compra: sirve como llamada de atención directa para el usuario y normalmente enlaza con la página web de la marca, donde se puede completar la compra.
Publicaciones y stories con productos comprables: permite que los usuarios y las marcas puedan etiquetar artículos concretos dentro de las fotos. Es habitual verlo en publicaciones de Instagram.