El término ERP se refiere a Enterprise Resource Planning y significa “sistema de planificación de recursos empresariales”. Este software permite gestionar las distintas operaciones internas de una empresa, desde la producción hasta la distribución o incluso los recursos humanos. A pesar de la inversión que suponen, un 40% de las empresas que adquieren un ERP notan un aumento en la productividad (Panorama Consulting de 2022).
A diferencia de un CRM, que está pensado para controlar la relación con los clientes y mejorar los procesos comerciales, los ERP se orientan a los procesos internos de la compañía, en entender cómo se relacionan entre ellos, con especial foco en las finanzas y productividad.
Según un estudio realizado por Nucleus Research (“Microsoft Dynamics Enterprise Applications for SMB”), los factores que motivan a las empresas a incorporar un ERP son:
El 58% por obsolescencia de hardware y software.
El 54% por integración de procesos.
El 50% para resolver problemas de procesamiento de pedidos.
El 38% para resolver errores y evitar datos duplicados.
El 35% para reducir el inventario excesivo.
Las principales ventajas que supone incorporar este software son:
Automatización de procesos de la empresa.
Disponibilidad de la información de la empresa en una misma plataforma.
Integración de las distintas bases de datos de una compañía en un solo programa.
Ahorro de tiempo y costes.